Editorial 7

Por Marlene Wayar Nuevamente El Teje presenta su producción que crece y se afirma. Reiteradamente hemos puesto el acento en lo enriquecedora y reparadora que nos parece la alegría, y cuán estimulante que resultan los talleres en los que interactuamos quienes conformamos esta redacción. Lo cierto es que luego queda…

Editorial 6

Por Marlene Wayar Aquí llegó otro número de El Teje que, como todos, tiene sus particularidades. Estas particularidades vienen en gran medi­da de la contingencia que se nos impone y de la carencia de una memoria colectiva si se piensa que los dos actos básicos por los cuales una sociedad…

Editorial 5

Por Marlene Wayar Mantener la risa de El Teje , el deseo, la alegría y la belleza es una decisión tomada y es de carácter político. Cuando abran este número y comiencen a recorrerlo, se darán cuenta de que esta vez quizá nos falta alegría. Hubo una producción un tanto…

Editorial 4

Por Marlene Wayar Amigas y amigos, No sin esfuerzo continuamos sostenidas/os por el Rojas, y nos encontramos sumergidas/os nuevamente en otro año de producción de cultura y de construcción de El Teje  como herramienta de diálogo colectivo. En esta ocasión, el editorial viene de confrontación. Hete aquí que en el…

Editorial 3

Por Marlene Wayar Construir un relato de nuestra propia historia es uno de los objetivos principales de El Teje. Al decir “nuestra”, explicitamos Historia Travesti que más que un concepto cerrado a partir de una definición sobre qué sujetos/as entran en esos parámetros, tiene que ver con quienes –en un…

¡¡¡Gracias!!! ¡¡¡Muchas gracias!!!

Por Marlene Wayar Para esta segunda editorial de El Teje, sólo conseguimos encontrar el agradecimiento y su manifestación más convencional. Nada es comparable a ese sentimiento que nos conmueve todo el ser al punto del llanto epiléptico; ha sido inconmensurable la respuesta que tuvimos, seguimos teniendo, y que ya nos…

Editorial 1

Por Marlene Wayar El Teje es una suerte de espejo. Les cuento: resulta que una niña oscura -de esas que se aburren de su maestrita tonta- pensó en sacudir la ciudad al extremo. Primero se recibió de doctora en leyes (boga) como si nada, pero leyendo otras cosas bien diferentes…